Insumos más baratos para trigo, pero más caros para soja y maíz
El aumento de los precios en pesos no pudo ajustarse al ritmo del dólar, que pasó de $ 38,5 en septiembre de 2018 a un valor de $ 56,5 un año después.
CÓRDOBA (NAP). Ante el contexto internacional desfavorable y la dificultad de los precios internos en seguir el ritmo del dólar, la soja y el maíz han deteriorado su poder de compra en el último año en 7% y 1,6% respectivamente.
Por otro lado, el trigo mejoró su relación insumo-producto en 7,2%. El precio de los granos retrocedió en el mercado disponible en Rosario en el último año, siendo el maíz y la soja los más perjudicados, con caídas del 5,6% y 4,2% , respectivamente, consignó el informe económico 291 de la Bolsa de Cereales y Productos de Córdoba.
La mayor oferta mundial e interna, tuvieron un impacto bajista en los precios, especialmente en el maíz, donde la producción nacional se incrementó en un 31% en relación con la campaña 2017/18.
Adicionalmente, el aumento de los precios en pesos no pudo ajustarse al ritmo del dólar, que pasó de $ 38,5 en septiembre de 2018 a un valor de $ 56,5 un año después, es decir, un incremento del 46,5% por ciento.
En este contexto, el poder de compra del maíz y la soja cayó, haciéndose notar en la cantidad de producción necesaria para adquirir una misma canasta de insumos.
Para la compra de glifosato y las semillas se necesitó en septiembre de 2019 un 43,6% y 4,4% más de grano comparado con un año atrás.
De esta forma, en época de siembra de la gruesa, es relevante observar la relación insumo-producto para analizar la conveniencia de calzar una parte de la producción a través de la compra de insumos para fijar los costos de producción de la nueva campaña
La soja fue la más perjudicada, con un deterioro en el poder de compra promedio del 7%. Para la compra de glifosato y las semillas se necesitó en septiembre de 2019 un 43,6% y 4,4% más de grano comparado con un año atrás.
Por otro lado, el costo relativo del gasoil o fosfato monoamónico disminuyó, reflejándose en la menor cantidad de la oleaginosa para adquirir la misma cantidad de productos, 8,6% y 7,7% menos respectivamente.
Para el caso del maíz ocurre algo similar. El glifosato y las semillas son los insumos que más se encarecieron con respecto al valor del cereal, llegando a incrementos de 45,7%, y 5,9% respectivamente.
Por otro lado, el fosfato monoamónico, el gasoil y la urea mejoraron su relación y se necesita de 9,5% a 5,8% menos de grano para su adquisición. Los aumentos en la relación insumo-producto obedecen tanto a la caída en los precios delos granos como al incremento del costo de glifosato, que pasó de costar USD 240 los 100 litros en septiembre de 2018 a costar USD 330 para el mismo mes de este año y, al ser uno de los principales insumos para el cultivo de soja, contribuyó al detrimento del poder de compra de los granos. (Noticias AgroPecuarias)