La BCR ajustó a la baja la cosecha de soja (a pesar de las lluvias)
Se proyectan 3,5 mill/tn menos. Las precipitaciones de este miércoles estuvieron muy centralizadas y sigue faltando agua en otras regiones.
ROSARIO (NAP). Este miércoles, en medio de la abundante lluvia que cayó en el centro de la región agrícola núcleo de Argentina, la Bolsa de Comercio de Rosario lanzó una corrección a sus proyecciones de cosecha de soja 2019/20, anunciando que cayó a 51.500.000 toneladas a nivel nacional, debido a la sequía que derivó en un recorte la producción de soja en 3,5 millones de toneladas respecto de hace un mes.
“Con 23 días sin lluvias importantes, la oleaginosa pierde un 6,3% de volumen”, destaca la Bolsa de Comercio en la estimación mensual. “Las lluvias de las últimas jornadas no alcanzan para frenar la caída de rindes en soja”.
La BCR destacó las lluvias ocurridas en las últimas horas en el noroeste de Buenos Aires y La Pampa: volvieron a recibir lluvias, aunque el evento ha sido desparejo y muy variable.
Las tormentas han hecho foco en Pehuajó y Trenque Lauquen, dejando 146 y 140 mm acumulados, respectivamente. Pero más allá de esta área productiva de Pehuajó que recibió esta gran recarga de agua, los montos de lluvias caen por debajo de 25 mm.
La entidad explicó que en el resto de la región pampeana, la falta de agua sigue vigente, van 23 días sin lluvias importantes.
La imagen actualizada al miércoles 11 de marzo, es elocuente, y muestra el avance de la desecación pese a las últimas tormentas.
El centro de alta presión que mantuvo sin precipitaciones todo este último tiempo, e incluso limitó desde antes a la franja este del país, empezó a desplazarse. Se esperan en las próximas jornadas lluvias con valores moderados.
“Se sigue con mucha atención la evolución de la tormenta, pero el impacto de la sequía, sobre todo en soja de segunda, ya condiciona los guarismos de la cosecha nacional”, destaca la BCR.
Bajo este marco, queda detrás la posibilidad de alcanzar 55 millones de toneladas como se estimaba en febrero: “El ciclo de la soja volvió a sufrir un revés en las condiciones climáticas y a partir de la tercera semana de febrero afrontó condiciones extremadamente secas”.
Con suelos que se han quedado sin reservas en los casos de soja de segunda, este ha sido el cultivo más afectado. Se estima que la falta de agua malogrará 510 mil hectáreas, que en gran se tratan de cuadros de sojas de segunda.
Tras el crecimiento del área triguera, la soja de segunda ocupa este año casi 5,6 millones de hectáreas, o sea el 32% de las 17,3 millones de hectáreas de la oleaginosa en Argentina.
Por eso, la caída de rindes se hace sentir sobre los promedios, sobre todo en la franja este de Argentina, ya que en buena parte de la región pampeana se estiman rindes en soja de segunda que podrían quedar por debajo de los 15 a 25 qq/ha.
Con este nuevo panorama, el rinde nacional promediaría 30,7 qq/ha, 1,7 quintales menos que en el informe anterior. Por lo tanto, la producción de soja se estima en 51,5 millones de toneladas.
Santa Fe, Entre Ríos y La Pampa
EStas son las provincias dónde más caen los rindes de soja: “A nivel provincial, las caídas en los rindes en soja que se reflejan en este último mes son graves”.
Santa Fe perdió casi 3 quintales y pasa a 34,3 qq/ha. En gran parte, el impacto está dado por el daño que han sufrido los cultivos en el sudeste provincial. Entre Ríos retrocede en 4 quintales, obtendría 23 qq/ha; La Pampa, 4,1 qq/ha.
Pero en términos de volumen, la mayor caída de la oleaginosa está en Buenos Aires dónde se recorta 1,13 millones de toneladas y en Santa Fe, con un descuento de 1 millón de toneladas respecto a lo estimado en febrero. Córdoba les sigue con una pérdida de 660 mil toneladas.
Por otro lado, Chaco y Santiago ahora en jaque por la falta de agua. Tras el diluvio en Gancedo -300 mm que cayeron en una jornada y dejaron pérdidas de área productiva-, ahora es la falta de agua lo que condiciona el desarrollo de la soja chaqueña.
El norte es la zona más afectada como sucede en Pampa del Infierno: “En Chaco y Santiago del Estero los cultivos tuvieron un gran desarrollo que ahora les juega en contra a la hora de resistir la gran desecación que sufren en pleno llenado de granos”.
Con esta falta de agua y las altas temperaturas actuales, cada día que pasa se pierden kilos de rinde. Es fundamental la llegada de lluvias en el corto plazo para sostener las expectativas provinciales que hoy están en torno a los 28,5 y 27,5 quintales, respectivamente. (Noticias AgroPecuarias)