Los empresarios agropecuarios están dejando de invertir en Argentina y se van a Uruguay y Paraguay
Lo advirtió el presidente de CRA. ‘Es por las medidas equivocadas y por la alta presión impositiva’, dijo Chemes. Los 3 puntos que ‘aliviarían’ la situación del productor.
BUENOS AIRES (NAP). El presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, Jorge Chemes, aseguró que por “efecto de las políticas equivocadas y por la alta presión impositiva, con medidas que rozan la inseguridad jurídica”, muchos empresarios agropecuarios comenzaron a dejar de invertir en Argentina para invertir en países vecinos.
“Los estamos viendo desde hace un tiempo: los empresarios agropecuarios miran a Uruguay y Paraguay para invertir y reducir la velocidad de trabajo en este país, o directamente suspenderla”, dijo Chemes por radio Continental.
Dijo concretamente que los empresarios argentinos arriendan sus campos argentinos para trabajar bajo arrendamiento en esos países y hasta “están pensando en la posibilidad de venta acá y compra en otro lado”.
El dirigente describió que en Uruguay o Paraguay la situación de los productores “es todo lo contrario: hay un panorama en donde se apoya a los sectores productivos, se los incentiva, se los ayuda financieramente e inclusive con menor carga impositiva”.
Impuesto a la riqueza
Por otra parte, Chemes advirtió que el impuesto a la riqueza que se debate en el Congreso va a alcanzar hasta los productores medianos. Apuntó que si bien no es un tributo a las empresas sino a las personas, “realmente muchos productores no tienen la rentabilidad y la facturación para afrontar ese impuesto por lo que lo están empujando a vender capital”.
El presidente de CRA dijo que el ruralismo están “haciendo gestiones con los funcionarios” para revertir la situación “porque lamentablemente va a producir un rechazo en todo el país” y advirtió que “siempre está latente la protesta”. Mientras, dijo que “apelamos primero al diálogo”.
Chemes enumeró 3 cuestiones para mejorar la situación de los productores:
-Un alivio en la presión impositiva.
-Una solución al tema financiero “porque no hay ayuda para invertir en la próxima campaña”.
-La reducción de la brecha cambiaria entre el dólar al cual se vende la producción y el que debe usar para comprar insumos. La diferencia, dijo, “funciona como una carga impositiva más”.
“Si tenemos en cuenta a la soja, la vendemos al dólar oficial de 79 pesos menos el 33% de las retenciones, con lo cual queda un dólar aproximado en 58-59 pesos. Cuando salimos a comprar los insumos, si bien los importadores lo ingresan al valor del dólar oficial, se le va cargando todo el proceso comercial y en el mostrador terminamos pagando el dólar paralelo”, describió. (Noticias AgroPecuarias)