No es la exportación; es la inflación y la presión impositiva
Con un comunicado, CRA salió a decir que la idea de cerrar el comercio externo a las carnes ‘es un desastre’ y que ‘en Argentina todo aumenta’ por 2 cuestiones.
BUENOS AIRES (NAP). “Autoritarismo, amenazas y medidas intervencionistas: recetas que ya fracasaron”. Así encabeza Confederaciones Rurales Argentinas el comunicado en el cual dejó asentado su rechazo a las amenazas del Gobierno de suspender los permisos de exportación de carnes bovinas para controlar los precios internos.
“En la Argentina actual, los precios relativos están distorsionados consecuencia de un proceso inflacionario de larga data y que no encuentra cauce y corroe los ingresos de toda la sociedad”. En este orden, CRA sostuvo que “el proceso inflacionario y la creciente presión impositiva en sus tres niveles (nacional, provincial y municipal) debe ser incorporado cada vez que se hable del precio final de cada producto porque sin duda, los costos están atravesados por estos factores, en Argentina todo aumenta, no solo la carne, pero parece que nadie quiere hacerse cargo de la política económica actual”.
La entidad que conduce Jorge Chemes acusó al Gobierno de pretender “hacer creer a la población que la exportación de carne es el factor desencadenante de su precio en el mercado interno sin considerar abiertamente la incidencia inflacionaria y la presión fiscal antedicha”.
Por eso, planteó que la idea de retomar el cierre de exportaciones como medida de control de precios “resulta un síntoma de la decadencia intelectual para enfrentar el tema”, atento a que la medida tomada en 2006 “bajo el mismo signo político produjo un desastre en el stock bovino, un cierre de innumerables frigoríficos y en corto tiempo un aumento considerable del precio del producto”.
“Paradójicamente los mismos que decidieron cerrar exportaciones se quejan ahora de la concentración de los frigoríficos, cuando fueron ellos quienes produjeron dicho efecto”.
CRA apuntó también que “los argentinos, consumimos alrededor de 120 Kilos por habitante /año de proteína animal, cifra a la que el complejo agropecuario abastece en forma fluida”.
“No volvamos a destruir la cadena de la carne, trabajemos para que haya más producción, más transparencia en la cadena, menos presión impositiva, más incentivos al agregado de kilos por animal y menos ideas obsoletas y demagogia”, concluyó CRA. (Noticias AgroPecuarias)