Se viene una concentración de autoconvocados ‘en defensa de la producción y el trabajo’
Será el próximo 9 de julio en San Nicolás. Convocaron a todos los ‘productores de alimentos’ y sectores relacionados, como los transportistas, operadores turísticos y gastronómicos.
SAN NICOLÁS, Buenos Aires (NAP). Sin esperar la resolución de una medida de fuerza de las entidades represenntativas de los productores agropecuarios, los denominados ‘autoconvocados’ -productores sin afiliación a entidades ruralistas- convocaron este martes a una concentración el 9 de Julio, en la entrada a la ciudad de San Nicolás, en el norte de la provincia de Buenos Aires, para “definir acciones de lucha contra las políticas económicas que nos llevan a la ruina”.
La convocatoria se lanzó luego de que el Gobierno anunció que levantaba la polémica suspensión de las exportaciones de carne vacuna pero en forma acotada y con la prohibición de exportar una serie de cortes, para preservarlos para el mercado interno.
Los autoconvocados llaman a sumarse “a todos los actores productivos, transportistas, distribuidores, comerciantes, empresarios hoteleros, turísticos y gastronómicos, pequeños y medianos industriales, y a la ciudadanía en su conjunto a participar de un encuentro nacional”.
El objetivo de la concentración será “en reclamo de medidas que alienten la producción y el trabajo”, según indicaron en un comunicado publicado por Ruralnet.
“En diciembre de 2019, a pocos días de asumir, el actual gobierno inició su campaña contra el campo con un aumento repentino de retenciones. En aquella ocasión, como en tantas otras, los productores empezamos la lucha para defender el fruto de nuestro trabajo. Pero, pocos meses después, la pandemia golpeó nuestro país, y decidimos postergar la pelea para aportar a la patria haciendo lo que mejor sabemos hacer: producir”
¿Cómo retribuyó el gobierno este gesto? Con desdoblamiento cambiario, el intento de expropiación de Vicentín, el cupo de exportación del maíz, el apoyo a Grabois y los suyos ante la usurpación de campos, el cierre de la exportación de carnes, y el eterno discurso anticampo al que nos tienen acostumbrados. Pero sería un error creernos las únicas víctimas de la política antiproducción del gobierno, sintetizaron”.
Por otra parte, añadieron que: “el 2020 nos demostró que no son enemigos del campo, sino de cualquiera que quiera vivir sin depender del Estado. Todos los argentinos trabajadores y productivos resultaron perjudicados por diversas medidas que obstaculizan o impiden su actividad, impuestas para obtener un rédito político, sostener un relato o frenar las consecuencias de una pésima gestión económica y sanitaria. Desde el cierre indiscriminado de muchísimas actividades, los controles de precios o la excesiva carga impositiva, hasta un discurso que tolera y alienta los avances contra la propiedad privada, el gobierno parece haber declarado la guerra a los trabajadores y las pymes desde el primer día, puntualizaron”.
Finalmente destacaron que la pandemia se transformó en la excusa perfecta para los sucesivos fracasos oficiales. En esta línea, la recesión, la inflación y el desempleo estaban garantizados desde mucho antes.
A su vez, expresaron que: “el coronavirus aún no había tocado suelo argentino cuando se impusieron las primeras medidas contra el sector productivo, aseveraron”.
