Los Protocolos para el feedlot, una herramienta clave
La incorporación de los protocolos para feedlot posibilitan mejorar el bienestar animal y hasta mejorar la rentabilidad.
BUENOS AIRES (NAP) La reciente presentación del Protocolo de Evaluación de Bienestar Animal en Engorde a Corral, se produce en un momento clave para la ganadería argentina.
Los animales provenientes de los feedlot son cada vez más demandados y las exigencias de los mercados son mayores.
Entre ellas aparece la exigencia de demostrar el buen trato que se les debe dar a los vacunos cuando son encerados a corral para engordarlos en períodos más cortos que oscilan entre los 60 y los 90 días.
Además los animales terminados en corales que se ajustan a estos protocolos, son más competitivos para los productores y permiten maximizar las ganancias en caso de pedirse certificar el “bienestar anima”l.
En ese sentido El Instituto de Promoción de la Carne vacuna Argentina (IPCVA), junto al INTA y diferentes universidades (Universidad de Buenos Aires, Universidad del Nodeste) trabajaron en el desarrollo de este protocolo. Si bien no es obligatoria su implementación, contribuye a mejorar el valor agregado.
Leandro Langman es ingeniero agrónomo y se desempeña en el Instituto de Alimentos del Centro de Investigación Agroindustrial del INTA Castelar y contó en el programa Visión de Radio, que se emite los viernes por AM AM1470, el papel que jugará este protocolo que cambiará la tarea en los feedlot y dio detalles de las principales características de esta herramienta
Langman resumió en cinco putos el bienestar animal que los clasificó en “Nutirición; ambiente, salud (factores relativos a la supervivencia) y, comportamientos y estados mentales (factores relativos a la ambientación).
Algunos países países de América Latina están interesados en incorporar parte de los indicadores de los protocolos
Las cinco libertades del animal se resumen en cuatro grandes principios “buena alimentación, buen alojamiento, buena salud y comportamiento apropiado de los bovinos, en el caso de los animales engordados a corral”, explicó el especialista.
El protocolo ya se terminó y se puede utilizar, inclusive para cumplir distintos objetivos dependen “de las metas que se establezcan, por ejemplo, caracterizar una región, en términos de bienestar animal para identificar posibles caracterizaciones a nivel regional en distintos puntos del país, o bien en base al interés de otros países que quieran incorporar los conocimientos del protocolo”, detalló Langman.
A partir de la creación de este protocolo, existe también la posibilidad de efectuar una caracterización de los animales a nivel continental, incluso, agregó “hay países de América Latina que están interesados en incorporar parte de los indicadores de los protocolos”, puntualizó el profesional.
Los protocolos se pueden aplicar al feelot en toda su dimensión y este instrumento se puede utilizar en una evaluación n que tiene 28 mediciones en el transcurso de una jornada de trabajo, hecho que se logra cunado un evaluador está entrenado.
Con la aplicación de los protocolos también se garantiza la seguridad de los trabajadores.
Asimismo, en distintas etapas, se puede implementar un plan de mejoras, por ejemplo, establecer una brecha entre lo que hay y lo que deberá hacerse mediante el plan de mejoras para alcanzar los objetivos propuestos.
Pero, sin lugar a dudas, el corazón del protocolo es el Bienestar Animal: “porque promover el bienestar animal tiene un impacto positivo y así lo demuestran los numerosos estudios que existen”, explicó
“Tenemos evidencia científica demostrativa que con el bienestar animal aumentan las variedades productivas, se minimizan los problemas referidos a la calidad de la carne, además de generar un impacto positivo en la calidad ética, aspecto que demandan los consumidores demandan cada vez más”, detallo el profesional.
Con la aplicación de los protocolos también se garantiza la seguridad de los trabajadores, una cuestión asociada a la actividad porque un animal agitado, por un mal manejo, en muchos casos es más peligroso.-
Además, el empleo de estos protocolos en el ámbito del feedlot permite una adaptación a las normativas vigentes en el orden nacional e internacional y, facilita la preparación para futuras normativas asociadas al bienestar animal nacional e internacional, además de abrir la puerta a las certificaciones de un establecimiento. (Noticias AgroPecuarias)