Las buenas prácticas no alcanzan para el campo
Nota de opinión de cómo el avance de la frontera agrícola y ganadera avasallando el ambiente y la urbanización desaforada amenazan a la vida cotidiana y a los buenos vinos.
BUENOS AIRES (NAP, por Jorge Ávila*). Los principales desafíos a la sustentabilidad de los ecosistemas y la preservación ambiental en nuestro país, esbozados por por el legendario Miguel Grinberg, con quien compartimos redacciones desde los años 70.
El avance de las proyecciones inmobiliarias, a través de grandes emprendimientos territoriales, y la constante extensión de la frontera agro-ganadera, sin respetar los conjuntos regionales, se constituyen aún hoy en amenazas que ya pueden advertirse claramente en la vida cotidiana.
Mientras la preocupación general sigue contando con un posible default de la economía, las advertencias sobre el default ambiental parecen escasas. La deserción argentina de los diversos convenios internacionales, entre ellos el reciente «el Acuerdo de París», revela consecuencias irreversibles para el futuro del calentamiento climático en el país, cuya verificación puede advertirse en mediciones históricas en constante superación respecto a temperaturas cada vez más altas en los veranos y períodos de enfriamientos muy reducido.
En materia urbanística se advierte una reacción creciente de los agentes naturales. La «invasión» de carpinchos, lagartos e iguanas en diversos emprendimientos que abarcan las zonas de Tigre, Escobar y el Delta del río Paraná, se repiten con menos difusión mediática en otras zonas de las provincias que encaran dichos proyectos urbanístico, sin respeto de medidas ambientales acordes.
La Ley de Humedales, la Ley de Bosques y la Ley de Glaciares parecen haberse convertido en letra muerta ante la avidez empresaria. Los reportes de situaciones irregulares, abarcan desde localidades en toda la provincia de Buenos Aires y CABA, pero además se suman nuevas construcciones irregulares en áreas tan diversas como distintas provincias patagónicas, la zona núcleo pampeana (Córdoba, La Pampa, Santa Fe) además de la castigada Santiago del Estero, Tucumán, el NEA , el Noa y el Litoral.
Estos cambios son consistentes con la ausencia de una planificación territorial adecuada, que data de antaño y nunca fue motivo de preocupación por gobierno alguno.
La ausencia de ciudades satélites autosustentables, como en su momento fueron Rafaela, Sunchales, San Francisco, San Rafael, ha devenido en programas de viviendas inaccesibles, siempre truncos e insuficientes.
La repercusión en materia agropecuaria ha sido crecientemente negativa. La deforestación para extender los terrenos de cultivo y las producciones pecuarias, provoca una serie de condiciones negativas para el crecimiento agropecuario. Diferentes mediciones de entidades del sector, revelan el agotamiento edáfico, la caída de valor proteico de los cultivos, y el crecimiento de la producción a corrales de la ganadería.
Desde la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes se ha elaborado una guía de Buenas Prácticas Agropecuarias, al tiempo que organismos oficiales tienen protocolos de Bienestar Animal que raramente son cumplidos por los productores. En muchos casos por desconocimiento y en otros por conveniencias comerciales.
Pero las BPA y los cuidados especiales son insuficientes. La realidad es que el avance de las nuevas condiciones del clima, con cambios en el sistema pluvial y en materia ambiental ya se reflejan en las producciones de toda índole.
Hace pocos días en una charla con bodegueros mendocinos, nos decían que las temperaturas de hasta 45ª en Mendoza y las zonas viñateras provinciales, se verán reflejadas en la cosecha de este año. «No nos preocupa la cantidad, que seguramente será importante este año, sino la calidad de la vid. Las uvas necesitan una temporada fría que cada vez es mas breve en el país. Los vinos que se hacen con estas condiciones, desde hace algunos años revelan menor acidez, cambios en los gustos de algunas cepas y cierta estandarización declinante», nos remarcaban.
Mientras esperamos la próxima vendimia, brindemos con los blends sobrevivientes. (Noticias AgroPecuarias)
*Periodista. Publicado en Ciudad Imaginaria