Cebada: perspectivas para el panorama global en 2024
Bajos volúmenes de producción global, stocks ajustados y problemas de calidad detectados podrían alentar una reactivación comercial en los meses previos a la cosecha del hemisferio norte.
NAP) A la espera de una “reacción” que no llega, el mercado de cebada observa un debilitamiento de precios como consecuencia de la consolidación de buenas producciones en Argentina y Australia y de la baja demanda, en especial en el mercado maltero/cervecero.
Así lo detallaron los ingenieros agrónomos de Cebada Cervecera Mario Cattáneo y Fidel Cortese, especialistas en el cultivo de cebada, en el último informe mensual.
Los bajos volúmenes de producción global, los stocks ajustados y los problemas de calidad detectados podrían alentar una reactivación de la actividad comercial en los meses previos a la cosecha del hemisferio norte.
Las estimaciones de producción mundial de cebada, para el ciclo 2023/24, se mantienen bajas, con ligeras variaciones, y casi 10 millones por debajo de la campaña anterior.
En su último informe, el USDA estima una producción global de 142 millones de toneladas para el ciclo mencionado, un comercio mundial de 27,5M y un stock final de 18 millones de toneladas, lo que continúa significando la menor existencia final en los últimos 10 años.
El mayor impacto en el comercio en los últimos años se ha dado por una importante disminución de las importaciones tanto de China como de Arabia Saudita, los dos mayores compradores de cebada del mundo.
En el caso de China, pasó de importar 12 millones de toneladas, en el 2020/21, a un promedio anual de algo más de 8 millones en los últimos 3 ciclos. Arabia Saudita importó 6 millones en la campaña 2020/21, teniendo un promedio de poco más de 4 millones en el último trienio.
La suma de la caída en importaciones de los dos mencionados países totaliza unos 6 millones de toneladas de cebada que no han estado en el mercado mundial en los últimos años.
En Europa, la situación de la demanda sigue sin recuperarse. Sin embargo, los problemas de calidad observados hacen que se mantenga un alto “spread” entre la cebada forrajera y la cervecera.
Los volúmenes de producción fueron buenos, pero la variabilidad climática provocó diferencias de calidad que hay que considerar.
Las siembras de cebadas invernales, disminuyeron en área por exceso de lluvias, se encuentran en muy buen estado y todo hace prever un aumento del área de siembra de cebada primaveral a los efectos de recuperar la superficie y el volumen de cebada, que parecería ser el gran desafío de Europa en el ciclo venidero.
Para Canadá se confirma la producción del presente ciclo en 8,85 millones de toneladas. Con una calidad heterogénea, se estima que el volumen producido facilitará el abastecimiento local y de exportación.
En el país del hemisferio norte, se observa una baja importante del precio de la cebada forrajera como consecuencia del mayor ingreso de maíz desde Estados Unidos. Analistas estiman que esta situación tendría influencia en la siembra de cebada 2024, la cual se vería reducida en superficie.
En Australia la cosecha finalizo, luego de los retrasos en el Este a causa de lluvias al final del ciclo del cultivo. Estas lluvias inoportunas ocasionaron problemas de calidad que disminuyen la tasa de selección para malterías.
Se estima una producción total de 11,2 millones de toneladas. Es intenso el movimiento exportador que, como es lógico, tiene como principal destino a China, y se pronostica que a fines del mes de febrero Australia haya exportado alrededor del 80 % de su saldo exportable de cebada.
Mercado argentino
Respecto a la campaña 2023/24, en el mercado local, la cosecha del cereal finalizó. Como ya se mencionó, con bajos rendimientos y calibres bajos en el sudoeste de Buenos Aires y en la región norte, desuniformidad en el centro norte de la Provincia de Buenos Aires y con rindes superiores a la media en el sudeste de Buenos Aires.
Se estima que la calidad obtenida, en cuanto a los parámetros de contenido de proteína y calibre, si bien se observaron valores fuera de standard, el volumen de cosecha permite realizar una buena selección cubrir las necesidades del mercado maltero/cervecero tanto doméstico como de exportación.
Lluvias y tormentas intermitentes retrasaron las labores de cosecha y en casos puntuales se han generado algunos casos de grano pregerminado.
La superficie cosechada estimada para esta campaña es de 1,15 millones de hectáreas, y de acuerdo a los rindes obtenidos se estima una producción de entre 4,7 y 4,8 millones de toneladas, concluyó el informe de la Consultora Cebada cervecera.
La producción de cebada argentina aumentó de manera significativa hacia finales de la primera década del 2000, impulsada por las políticas desalentadoras para la producción de trigo y la apertura del mercado de cebada forrajera como consecuencia de la gran sequía que afectó Rusia y Ucrania en el año 2010(Noticias AgroPecuarias)