Los productores tienen mayor incertidumbre y perdieron confianza en su suerte en 2025
Según una encuesta de la U. Austral, la confianza cayó 21,5% respecto a noviembre de 2024, reflejando el impacto de la situación económica, climática y de mercado.
(NAP) La baja rentabilidad de la producción agrícola y la incertidumbre sobre los derechos de exportación condicionan las decisiones de inversión de los productores, según el último informe del Ag Barometer Austral, elaborado por el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.
El estudio reveló que la confianza en el sector experimentó una caída del 21,5% en comparación con noviembre de 2024, situándose en 117 puntos.
Se trata de la baja más significativa desde julio de 2019, cuando el índice descendió drásticamente tras las elecciones primarias de aquel año.
A pesar del descenso, el índice se mantiene por encima de los 100 puntos, lo que indica que, aunque la preocupación es creciente, una porción mayoritaria de los productores sigue siendo moderadamente optimista respecto al futuro. Este optimismo se sostiene en el Índice de Expectativas Futuras, que también cayó, pero en menor medida (17%).
Factores económicos y climáticos
El informe destaca que la caída en la confianza está impulsada por factores climáticos y económicos. La reducción de los ingresos debido a menores rendimientos y precios, sumada al incremento de los costos de producción, está afectando la rentabilidad del sector.
En este contexto, 67% de los productores considera que no es un buen momento para realizar inversiones en activos fijos. Las expectativas de inversión se desplomaron un 41% respecto al informe anterior, lo que podría impactar la productividad a corto y largo plazo.
A pesar de los reiterados reclamos por una reducción en los derechos de exportación, la principal preocupación de los productores sigue siendo la rentabilidad. Los impuestos a la exportación, sumados a la caída en los precios internacionales de las commodities, dificultan la competitividad del productor argentino frente a mercados como Brasil y Estados Unidos.
Sin embargo, la reciente reducción parcial y temporaria de las retenciones anunciada por el gobierno ha generado un leve alivio en el sector. De hecho, el 45% de los productores afirma que esta medida acelerará las ventas y fijación de precios de la soja.
Defaults
El informe también resalta las dificultades financieras que enfrentan algunas grandes empresas de agroinsumos, como Surcos y Los Grobo Agropecuaria, lo que ha generado preocupación entre los productores.
No obstante, el 79% de los productores considera que estas situaciones no afectarán significativamente al sector en su conjunto, aunque un 14% advierte que podrían dañar la reputación de la industria y endurecer las condiciones de financiamiento.
El inicio de 2025 presenta un panorama de incertidumbre para el sector agropecuario, marcado por la baja rentabilidad, la preocupación por los derechos de exportación y la caída en la confianza de los productores. Sin embargo, las expectativas a mediano plazo siguen siendo relativamente favorables, impulsadas por la adopción de nuevas tecnologías y por la esperanza de mejores condiciones de mercado.
En los próximos meses, la clave estará en cómo el sector se adapta a las cambiantes condiciones económicas y políticas para sostener su competitividad y crecimiento.
Insumos biológicos
En medio de un contexto desafiante, un dato positivo es el creciente interés por los insumos biológicos. Un 61% de los productores ya los utiliza en su producción, principalmente inoculantes para semillas, bioestimulantes y biofertilizantes.
El principal incentivo para esta adopción es la posibilidad de mejorar los rendimientos, aunque también se valora su contribución a la sustentabilidad ambiental.