En julio las aceiteras y las cerealeras liquidaron exportaciones por más de 2.900Ms de dólares
La merma del 10,5% del ingreso de divisas estuvo relacionado con la caída e los precios internacionales, la aparición de la pandemia por el Coronavirus 19 y la bajante sostenida del río Paraná.
BUENOS AIRES (NAP) las empresas agroexportadoras que incluye a las aceiteras y a las cerealeras liquidaron en julio exportaciones por más de 2.296 millones de dólares, cifra que presenta un incremento del 1,83% con respecto a igual mes de 2019, indicaron CIARA y CEC en su informe mensual. LAS dos entidades reúnen en su ceno el 40% de las exportaciones argentinas.
El ingreso de divisas en julio decreció en un 2 % (- U$S 479 mil) con respecto a junio último, cuando se habían liquidado 2,34 mil millones de dólares.
Asimismo, el monto liquidado desde comienzos de año asciende a más de 11.603,3 millones de dólares, cifra que resulta inferior en un 10,55 % al acumulado en los primeros siete meses del año anterior, que fue de poco más de 12.972.5 millones de dólares.
En el ingreso de divisas acumulado hasta julio pasado influyó la relativa caída internacional de precios de los commodities, aceites y sus derivados industrializados por la pandemia mundial del COVID-19; la menor exportación de subproductos con valor agregado derivados de la soja que suelen tener precios más elevados que la materia prima lo que deprime el ingreso total de divisas; las dificultades operativas por la bajante persistente del río Paraná y las demoras en las operaciones por la aplicación de los estrictos protocolos sanitarios en el proceso de exportación.
El principal producto de exportación del país es la harina de soja (13,5 % del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial.
La liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial.
La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas. Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate, por lo que no existen retrasos en la liquidación de divisas.
En este sector, las comparaciones estadísticas entre distintos períodos son generalmente imprecisas o inexactas ya que la liquidación de divisas está fuertemente influida por el ciclo comercial de los granos, que depende de diversos y cambiantes factores exógenos como oscilaciones internacionales de precios, retracción de la oferta, distinto volumen y valor proteico de las cosechas, condiciones climáticas, feriados, medidas de fuerza sindicales, modificaciones regulatorias, barreras arancelarias y para arancelarias del exterior, exigencias fitosanitarias o de calidad de otros países, etcétera.
El complejo oleaginoso-cerealero aportó, el año pasado, el 40,78 % del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del INDEC.
El principal producto de exportación del país es la harina de soja (13,5 % del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial, que tiene actualmente una elevada capacidad ociosa cercana al 50% (Noticias AgroPecuarias).