De una hidrovía más federal a la caja estatal
Argentina está lejos de los principales mercados del mundo, por lo tanto, la competitividad de nuestros productos está supeditada a la eficiencia de nuestros sistemas logísticos.
BUENOS AIRES (NAP) Así se titula el documento que elaboró Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), tras conocerse la semana pasada la estatización por 12 meses de la explotación de la hidrovía Paraná – Paraguay, la principal vía fluvial que permite llevar al Atlántico la producción desde el norte grande.
La Hidrovía Paraná-Paraguay fue la gran obra de infraestructura que permitió durante un cuarto de siglo que los buques oceánicos ingresen al núcleo de nuestra producción agroindustrial, e implica al día de hoy una gran avenida por la cual transcurre el 80% del comercio exterior de nuestro país.
En un documento preparado por Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) se asegura que Resulta atinado recordar que antes de la concesión del dragado y la señalización de la red de navegación troncal esas tareas las realizaba el Estado, de manera deficiente e imprevisible, y a partir de la concesión financiada por los privados bajo control estatal se consagró un sistema logístico virtuoso, que permitió además la integración con nuestro países vecinos.
Ante el vencimiento del contrato de concesión de la Hidrovía, el actual Gobierno Nacional mantuvo un rumbo serpenteante.
El gobierno nacional estatizó la hidrovía Paraná – Paraguay que que desde el 1 de julio maneja la Administración General de Puertos.
Se celebró un Acuerdo Federal de Hidrovía con los gobernadores y se conformó una Sociedad de Estado entre Nación y Provincias con un objetivo que luego no lo fue; se creó la unidad ejecutora que iba a elaborar los pliegos de la futura licitación internacional y luego se la desactivó; se creó el Consejo Federal de Hidrovía invitando a provincias e instituciones, que sólo tuvo una reunión plenaria pomposa allá por febrero y luego se serenó.
Frente al inminente vencimiento del contrato se decidió continuar el mismo de manera precaria por 90 días; y finalmente se dictó el Decreto de Necesidad y Urgencia 427/21 por el cual se le otorga a la Administración General de Puertos (AGP) la concesión.
“Muchas voces hemos sostenido la necesidad de ir hacia una nueva licitación internacional para concesionar la vía de navegación y lograr un sistema más óptimo, y en el mientras tanto prorrogar la actual concesión. No es bueno cambiar de caballo a mitad del río, y modificar el statu-quo vigente durante 25 años implica poner en peligro nuestra vía de comunicación con el mundo, al menos que se nos quiera aislar del mismo”, asegura el documento publicado esta mañana.
Para un asunto que es política de Estado y que requiere de la mayor previsibilidad, hasta el momento acumuló muchos anuncios, con marchas y contramarchas, y sólo una concreción: la caja de la hidrovía la administrará el Gobierno Nacional. ¿Más federal? El federalismo puede esperar, concluye el documento (Noticias AgroPecuarias)
